Entradas

Mostrando entradas de abril, 2014

El bótox y el desarrollo psico-emocional de los/as niños/as

Imagen
      « El uso de bótox puede hacer que se empeore el desarrollo psico-emocional de  algunos niños» afirma el doctor Ruíz Rodríguez, uno de los dermatólogos participantes  en el congreso de dermatología celebrado en Denver, hace tan sólo unas semanas.               Cuando nos sentimos tristes, alegres, sorprendidos, etc. lo mostramos a través de  nuestro rostro con la ayuda de los músculos de la cara. Éstos, inmediatamente, envían  una retroalimentación al cerebro para constatar que la emoción que sentimos es  genuina.                Las personas que abusan del bótox no pueden mostrar las emociones a través de  los músculos de su cara y eso puede provocar que no sientan las emociones del mismo  modo que lo hacían antes de inyectarse bótox, además corren el riesgo de tener  problemas para reconocer las emociones de los demás y los demás tampoco  reconocerán  las emociones de estas personas, por tanto les será difícil saber si él

"No puedo"

Imagen
      Frecuentemente escuchamos “no puedo soportarlo más”, “no puedo dejar a mi pareja”, “no puedo realizar ese trabajo” etc. Pero ¿qué hay detrás de estos “no puedo”? -       ¿Es el “no puedo” un modo de protegernos? -       ¿Cuándo decimos “no puedo hacerlo” en realidad queremos decir “no quiero hacerlo”? -       ¿Cómo sabemos si nos responsabilizamos o nos culpabilizamos ante una situación? Te respondo a todas estas preguntas a partir del minuto 22:30. Haz "clic" en el enlace de abajo para escucharlo. "Vamos a aprender a conocernos con Rocío Rivero" Programa Radio Guadalquivir rocioriverolopez@gmail.com

Algo íntimo

Imagen
     Tan necesario es comunicarse y compartir ciertas experiencias, sentimientos y  emociones, como mantener nuestra intimidad.       Sin intimidad no existirían las relaciones de amistad o de pareja. La intimidad es el  espacio reservado a nosotros mismos, aunque –en cierta medida- lo podemos compartir  con otra persona.       Los momentos de intimidad nos ayudan a reflexionar, a crear y a marcarnos  objetivos. Sin estos momentos difícilmente podríamos cavilar acerca de lo que estamos  viviendo y, con ello, decidir el comportamiento que queremos tener con nuestra familia,  amigos, pareja, compañeros de trabajo, etc.       La intimidad también nos ayuda a descubrir y a poner nombre a nuestro estado de  ánimo y cuando somos conscientes de este estado podemos actuar en consecuencia.       Las personas que se toman un momento de intimidad para reflexionar tienen un  mayor control de sus emociones y no actúan precipitadamente.   roc